2008-09-12
La Fundación Española de Psiquiatría y Salud Mental (FEPSM), ha publicado un Consenso para establecer a modo de guía las pautas de diagnóstico y tratamiento del Trastorno de Ansiedad Generalizada (TAG).
El ritmo de vida de la sociedad actual es uno de los principales condicionantes de la aparición de este trastorno.
Actualmente, cuenta con un nivel de prevalencia anual del 3% en la población y la mayor frecuencia de sufrir TAG se ha observado en edad adulta joven (20 y 35 años) y suele ser más común en mujeres.
Ansiedad, estrés o preocupaciones excesivas sin que exista una causa específica son los síntomas principales.
Madrid, 4 de septiembre de 2008.-La Fundación Española de Psiquiatría y Salud Mental (FEPSM), ha elaborado un Consenso sobre las pautas de diagnóstico y tratamiento del Trastorno de Ansiedad Generalizada (TAG). El objetivo de este estudio es concienciar a los profesionales y a los propios enfermos de las ventajas que aporta en el tratamiento de la enfermedad una adecuada atención ante los síntomas de esta patología.
Bajo el título de ‘Consenso español sobre evaluación y tratamiento del trastorno de ansiedad generalizada’, dicho informe recoge, a modo de guía para otros profesionales, las conclusiones de 183 psiquiatras que, de forma anónima, han respondido a un amplio cuestionario de preguntas sobre la enfermedad.
El Trastorno de Ansiedad Generalizada, se caracteriza por la aparición de ansiedad o preocupación excesiva sin que exista una causa específica y la dificultad para controlar ese estado de preocupación. Además suele acompañarse de otros síntomas como inquietud, tensión muscular o alteraciones del sueño. A pesar de contar con un nivel de prevalencia anual del 3%, se ha convertido en el trastorno de ansiedad más frecuente en las sociedades occidentales.
El riesgo de sufrir TAG, varía dependiendo de las características de cada persona y aunque pueden existir factores biológicos que condicionen su aparición, son los factores psicológicos los más determinantes. La mayor frecuencia de sufrir TAG se ha observado en edad adulta joven (20 y 35 años) y suele ser más común en mujeres. Se trata de un trastorno que coexiste a menudo con otros trastornos (distimia, trastorno depresivo, trastorno de adaptación o trastorno por abuso de sustancias alcohólicas y otras drogas).
